Recuperación de la Salud

Un paciente enfermo producto de problemas de salud, derivado de la depresión o adicciones, experimenta una profunda soledad, aunque esté rodeado de muchas personas, incluyendo sus propios familiares y amigos.

La soledad intensa es uno de los síntomas más sobresaliente de un espíritu enfermo, ante lo cual el paciente encuentra que la vida no tiene sentido, no encuentra razón de ser ni de existir, sintiéndose muchos como muertos en vida.

El espíritu enfermo experimenta odio crónico contra todos, además de dolor, soledad, miedo, intolerancia, egoísmo excesivo, envidia etc., causando debilidad espiritual y moral y disminuyendo la capacidad del espíritu para disfrutar y enfrentar la vida con efectividad.

La depresión puede llevar a la muerte, debido a que elimina las ganas de vivir, las personas se frustran, incluso podría provocar anemia aguda y con ello fallan los riñones, articulaciones y la vista.

La sanación de éste problema es mejorada de forma gradual durante el tratamiento.